Prácticas agrícolas

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El suelo es el gran conector de las vidas, la fuente y el destino de todas. El suelo sana restaura y resucita, por él la enfermedad se convierte en salud, la edad en juventud, la muerte en vida. Sin el cuidado adecuado no podemos tener comunidad, porque sin el cuidado adecuado no podemos tener vida.

Las prácticas agrícolas del Farm Hub se basan en un enfoque holístico.

Nuestras prácticas incluyen la rotación de cultivos, los cultivos de cobertura, el monitoreo de la salud del suelo, la labranza reducida/no-labranza, la colaboración en investigación en la granja y el manejo orgánico de plagas. No utilizamos pesticidas sintéticos, herbicidas ni fertilizantes potencialmente dañinos. Todos los campos e invernaderos están certificados como orgánicos por el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA).

En el Farm Hub, creemos que la agricultura es una danza entre lo que la tierra puede proporcionarnos y lo que nosotros podemos proporcionar a la tierra. Numerosas iniciativas para mejorar la salud del suelo, un programa dedicado a aumentar la biodiversidad en la granja e investigar formas en que la agricultura puede hacerse más resistente frente a un clima en cambio constante, son solo algunas de las maneras en que estamos trabajando para garantizar que nuestra tierra y sus recursos se preserven y protejan para las generaciones futuras.

Salud del suelo

Un suelo sano produce alimentos sanos. Es un organismo vivo, complejo, que respira, que es capaz de enriquecer no solo los alimentos que se cultivan en él, sino también los ecosistemas que lo rodean y la propia Tierra. Un suelo sano puede proporcionar nutrientes sin agotar el suelo, puede retener agua para evitar la escorrentía y la erosión, y contiene bacterias beneficiosas que ayudan a los cultivos a combatir las enfermedades. En el Farm Hub, los cultivos intensivos de cobertura de múltiples especies, la rotación de cultivos reflexiva, abundantes enmiendas de composta, la labranza reducida y el mapeo de carbono en el suelo son algunos de los métodos que estamos probando para nutrir, mejorar y comprender mejor nuestro suelo y sus interacciones con nuestros cultivos y el medio ambiente que nos rodea.

Mejorar la salud del suelo

Cultivos de cobertura

Los cultivos de cobertura, o la práctica de cultivar principalmente para mejorar el suelo, es una de las estrategias de producción más críticas que empleamos en el Farm Hub. Una inversión a largo plazo, los cultivos de cobertura agregan y conservan nutrientes en el suelo, estimulan la biología del suelo, acumulan materia orgánica, previenen la erosión, conservan el agua, rompen la compactación, suprimen las malas hierbas, almacenan carbono y mucho más: los beneficios son numerosos y amplios.

En cada temporada de cultivo, en cada campo de producción se hará al menos un cultivo de cobertura de especies mixtas y normalmente se plantará utilizando técnicas de no-labranza que mejoran aún más los beneficios de los cultivos de cobertura.

Los Cultivos de Cobertura establecidos en el Farm Hub incluyen bromo, hierba timotea, alfalfa, chícharos, trébol, girasoles, cáñamo sunn, triticale, rábano, arveja, alforfón, y mostaza.

Rotación de cultivos

La rotación de cultivos es la práctica sistemática de cultivar diferentes cultivos en un terreno durante un ciclo de varias temporadas. Sin la rotación de cultivos, aumentan las plagas y las enfermedades, se agotan los nutrientes, se pierde la materia orgánica y se requieren cada vez más insumos para mantener cultivos sanos. Por el contrario, una rotación de cultivos bien diseñada garantiza un suelo equilibrado, resistente y capaz de regenerar su estructura, química y microbioma.

En el Farm Hub, una de las estrategias que practicamos cambia entre vegetales, cultivos de cobertura y granos pequeños en un área de 100 acres de nuestra tierra más productiva durante un ciclo de 3 años. Los 100 acres se dividen en tres campos de aproximadamente 30 acres. Cada temporada, uno de estos campos de 30 acres será un cultivo mixto de vegetales, otro será un cultivo de cobertura mixto y en el otro se cultivará un grano pequeño. Estos tres tratamientos rotan por los tres terrenos cada año y en el cuarto año la rotación comienza de nuevo.

Mapa de rotación de cultivos

En el caso de los cultivos de campo, el maíz, la soja y el trigo se cultivan en una rotación de cuatro años para permitir una temporada de descanso bajo cultivos de cobertura que mejoran el suelo.

Labranza reducida y no-labranza

Reducir la labranza es otra técnica importante para mejorar el suelo y mitigar el cambio climático. Kris Nichols , experta en suelos, explica que no existe una definición única de no-labranza o labranza reducida y que varía en cada granja según sus objetivos particulares. En el Farm Hub, nuestro objetivo es mejorar la calidad del suelo, reducir la erosión y aumentar la biodiversidad de microorganismos en el suelo. La técnica principal que utilizamos consiste en plantar nuestros cultivos en cultivos de cobertura arrollados y aplastados (roll and crimp).

El rodillo aplastador es un cilindro lleno de agua, con cuchillas con patrón de zig zag que se acopla a la parte delantera de un tractor. El rodillo aplastador aplana los cultivos de cobertura para terminarlos. El cultivo de cobertura permanece en el suelo y forma un mantillo que sofoca las malas hierbas y protege el suelo. Los implementos en la parte trasera del tractor separan el manto del cultivo de cobertura, plantan las semillas del cultivo comercial y las cubren para asegurar contacto con el suelo. Se realiza en una sola pasada, cosa que ahorra tiempo y energía para el agricultor. Luego el cultivo comercial que se plantó crece a través del mantillo del cultivo de cobertura.

Invernaderos

En Farm Hub, actualmente operamos 5 estructuras de invernadero y túnel alto que abarcan 24.000 pies cuadrados de espacio de cultivo. Estas estructuras producen cultivos los 12 meses del año y están profundamente entrelazadas con la misión de Farm Hub de apoyar a nuestra comunidad, tanto a la comunidad que nos rodea, con alimentos nutritivos durante todo el año, como a las personas que dependen de la granja para su subsistencia, proporcionándoles un medio de empleo durante todo el año.

A primera vista, estos invernaderos parecen un poco diferentes de lo esperado. Esto se debe a que cada invernadero está probando nuevos sistemas innovadores que pueden ser utilizados por los agricultores para reducir los costes energéticos, mejorar las rotaciones de cultivos, aumentar la rentabilidad y beneficiar al medio ambiente cuando
en comparación con los invernaderos tradicionales. Dos son completamente pasivos, no necesitan electricidad ni combustibles fósiles para funcionar, y son totalmente móviles, por lo que pueden trasladarse fácilmente de un lugar a otro de la granja. Tres de los invernaderos están recubiertos de un material único que mejora muchas de las cualidades del plástico de los invernaderos tradicionales y dura 5 veces más. Dos de los invernaderos se pueden supervisar y manejar a distancia a través de la nube y uno utiliza un sistema de calefacción radiante en el suelo. Los cinco invernaderos están en producción todo el año.

Durante los meses de verano, los invernaderos se utilizan para cultivos de temporada, como tomates y pimientos, mientras que en invierno, sin calefacción o con una calefacción mínima, se utilizan para producir una gran variedad de verduras frías como espinacas, col rizada y lechugas, que se cosechan desde noviembre hasta principios de primavera. Los cultivos de cobertura también forman parte integrante de la rotación de cada estructura, al igual que en el resto de la explotación. Utilizando diversas prácticas innovadoras, Farm Hub trabaja para desarrollar sistemas de invernadero prácticos que satisfagan no sólo las necesidades de los agricultores, sino también las de los consumidores y el medio ambiente.

Cultivar con la naturaleza

Tanto lo que cultivamos como la forma en que lo hacemos son igualmente importantes para la gestión de la tierra y el servicio a la comunidad. Mediante la investigación, los programas educativos y la gestión del hábitat, el centro de la granja explora, comparte y aplica prácticas agrícolas ecológicas que fomentan la biodiversidad.

Una pregunta clave que exploramos en nuestro trabajo es: "¿Cómo producimos alimentos y seguimos manteniendo un medio de vida para los agricultores, respetando al mismo tiempo las necesidades de otros organismos con los que compartimos la tierra?" El reciente declive de la biodiversidad puede atribuirse en parte a las repercusiones de la agricultura, como la pérdida, fragmentación y degradación de hábitats; la mortalidad de plantas y animales relacionada con los pesticidas; y los efectos de un clima cambiante en la fauna, las plantas, el suelo y la calidad del agua. Una de nuestras iniciativas, la Colaborativo de Investigación de Ecología del Agro-Paisajees un enfoque orientado a la comunidad para estudiar y compartir información sobre prácticas agrícolas ecológicas. La colaboración lleva a cabo investigaciones interdisciplinares con el objetivo de utilizar lo aprendido para ayudar a la tierra, a las personas y a las criaturas salvajes que dependen de ella.

Nuestro trabajo sobre prácticas agrícolas ecológicas se difunde a través de conferencias regionales, películas, actos en las explotaciones, recursos en línea y otras vías. Algunos ejemplos de nuestro trabajo son las estrategias de siega en la explotación para tortugas y aves de pastizal, el seguimiento a largo plazo del suelo, el agua, las plantas y los animales y un evento anual en la explotación sobre el establecimiento de praderas autóctonas y sus posibles servicios a la producción de cultivos.